Reserva

Todo el mundo, cuando habla de Canarias, menciona sus fantásticas playas de arena fina y aguas cristalinas, su clima espectacular durante todo el año o la amabilidad de sus gentes, y todos soñamos con visitar las islas especialmente en invierno, huyendo del clima gélido, la gripe y, cómo no, del estrés de la ciudad. Pero nunca nos habían contado los riesgos que tiene visitar las islas en invierno, y hoy queremos abrirte los ojos para que decidas si te conviene o no visitarnos en la temporada más fría del año, toma nota:

- Puedes ser el más odiado del barrio: y no sólo del barrio, también del trabajo, de tu círculo de amigos y de las redes sociales, ya que el moreno con el que llegas a casa en pleno invierno, mientras los demás están blancos como la nieve, te va a granjear más de una envidia y enemistad.

- Te puedes gastar más dinero del necesario: sí, en exceso de equipaje, facturando una maleta de más con tu abrigo, botas altas, jerseys de cuello alto y demás ropa invernal que, cuando llegues a las islas, te darás cuenta de que no te hacían falta y has pagado por ello en vano, cuando podías haber venido con tu equipaje de mano, en el que caben perfectamente 3 bikinis, las chanclas y vestidos ligeritos.

- Puedes socializar menos: Y es que las largas colas de gente de tu misma ciudad que hay en los centros turísticos en temporada alta de verano no las encuentras en invierno.

- Puede cambiar tu reloj biológico: porque cambiar del frío aterrador a un sol maravilloso se nota en el organismo, además de cambiar de horarios y dejar de madrugar, apagar el despertador y no tener hora para acostarte pueden hacer que tu cuerpo sienta que estás en otro planeta.

- Puede peligrar la relación con tu nutricionista: y también con la báscula, aunque esto ocurre también en verano, pero no deja de ser un riesgo, ya que la comida típica canaria, con sus pescados frescos y su cochino negro, papas con mojo, almogrote y dulces típicos son una delicia para cualquier paladar y te llevarás más de una sorpresa cuando vuelvas a casa y no entres en la ropa. Pero eso sí, estarás bien morenito y cualquier outfit te sentará mucho mejor.

Ya dice el refrán que todo depende del cristal con que se mire, y es que todos los riesgos pueden convertirse en cosas buenas, así como todas las dificultades en oportunidades. Nosotros lo tenemos claro, y siendo canarios no podríamos verlo de otra manera, lo miremos por donde lo miremos, sólo encontramos cosas buenas en venir a disfrutar de Canarias en invierno. ¿Y tú? Reserva ya tu estancia en www.pyhotels.com y descubre todo lo que nuestras islas tienen que ofrecerte. Y ahora que ya sabes los riesgos, ¡al menos te ahorrarás el traerte toda la ropa de abrigo en la maleta!